En el Hogar Nazaret la jornada viene jalonada por dos momentos diferenciados: la mañana, ajetreada y bulliciosa, que discurre entre tareas domésticas, hábitos saludables y talleres variados de implicación total por parte de los chicos y chicas…y la Tarde, más sosegada y con tiempo para pensar en sí mismo gracias a la intervención psicológica dos veces a la semana para fortalecer y reforzar los puntos de crecimiento de cada uno/a.
A esta base le sumamos deporte, le sumamos Asamblea, para crecer como familia y le sumamos un punto de desconexión y de uso de medio tecnológicos al alcance de cualquier adulto del Siglo XXI.
Una vida preciosa que necesita ser COMPARTIDA!!!